Atados al mundo - Reseña

Jubilee Chase es una capitana de las fuerzas armadas. Flynn Cormac es un colono que lidera la rebelión. No deberían haberse conocido nunca. Él es el carcelero, ella la prisionera.
Esto es la guerra.

A pesar de estar poniendo la portada española, quiero empezar esta reseña explicando que leí el libro en inglés, dado que esta editorial no llega a mi país. Así que, en una de esas, nombro algo de la forma inglesa en vez de la traducida. Les pido perdón desde ya. También aprovecho a comentar que pueden leer la reseña de la primera parte aquí.

Por razones personales, dejé pasar varios días después de terminado el libro para hacer la reseña, así que puedo quedarme más corta o con menor contenido que de costumbre debido a esto. Normalmente me gusta hacerlo de inmediato para retener todos los detalles, pero bueno...

Pero vamos a lo que nos interesa: la reseña. Tenemos una sinopsis súper cortita, pero que sin embargo explica bastante bien lo que sucede. Les voy a dar un poco más de insight.

A diferencia del planeta vacío en el que se habían quedado atrapados Lilac y Tarver, ahora estamos en Avon; un planeta pantanoso, que no logra avanzar en las etapas de la terraformación. Allí los civiles viven bajo el control de los militares, después de una rebelión muy violenta hace unos diez años. Los rebeldes, llamados Fianna, creen que los militares usan una «enfermedad» llamada the Fury para justificar la extrema violencia con la que atacan, aparentemente sin razón, mientras que los militares incluso hacen cambios periódicos de personal para evitar esto. Se supone que hay algo en ese planeta, en los pantanos, que termina por volverlos locos. Incluso hay síntomas, como sueños y dilatación de pupilas. De cualquier forma, los civiles en Avon viven bajo la opresión y la pobreza, sin saber cuándo van a poder tener un planeta en condiciones.

Una vez más, tenemos una historia narrada a dos voces. Una de nuestras protagonistas es la capitana Jubilee Chase, conocida como Lee Stoned Face Chase por sus aparentes nervios de acero, pocos escrúpulos y cero emotividad. Ella misma se lo cree, incluso. Por eso es tan importante la evolución que sufre —sí, la sufre— en este libro, así como ir conociendo más sobre su pasado muy lentamente, lo que explica más de una cosa. Me pareció interesante que las autoras eligieran tener a una protagonista de una mezcla étnica tan interesante; madre china —aunque el concepto de chino es complicado, dada la cronología de la humanidad— y padre de color. Le da un bagaje cultural amplio, que no siempre tenemos en nuestros personajes. 

El otro narrador es Flynn Cormac, uno de los Fianna, que aunque en la sinopsis ponen como líder de la rebelión, es un pacifista. Su meta es resolver el conflicto con los militares de la forma más diplomática posible, en busca del bien común. De apariencia extrovertida, pero con un mundo interior enorme, Flynn es quien da el paso y secuestra a Jubilee para intentar obtener información sobre una base secreta en Avon. Y ahí empieza todo. 

Me gusta la relación que hay entre ellos. Me gusta que no sea un instalove, que sean conscientes de las dificultades que plantean sus puestos, y que cuando spoiler todo se va a la mierda spoiler, sepan qué es lo que sienten y spoiler aunque no se amen, quieran darse la oportunidad de descubrir a dónde los lleva esa relación spoiler. También me encanta la forma que tienen de apoyarse en situaciones traumáticas, cómo construyen la confianza y trabajan juntos para conseguir su objetivo en común.

A diferencia también de Atados a las estrellas, hay más personajes interactuando con ellos durante la historia, pero no voy a hablar tanto de ellos porque creo que ya perdí matices con los días que pasaron. No son tantos, pero cada uno de ellos es una pieza clave de alguna forma. Faltó decir, además, que la gente en Avon tiene ascendencia irlandesa, por lo que esa herencia tiene un papel grande en la forma de encarar la vida de estos personajes. Mi preferida fue Sofía, y no solo porque compartimos nombre, eh. Me gustó mucho su personalidad. Mi parte favorita: spoiler cuando aparecen Lilac y Tarver. Morí de fangirleo spoiler.

Quizás no disfruté tanto del entorno. A ver, es más complejo que el planeta a medio terraformar del primer libro, pero sigue siendo un entorno pantanoso asqueroso. Da mucho juego y me parece clave para lo que busca la historia, pero a mí justo no me hizo feliz. Esto es personal, no algo que considere un error. Tengo la esperanza de conocer planetas con un mayor avance tecnológico que nos muestre otras realidades, todavía queda un libro para eso.

De cualquier manera, creo que la organización social está descrita de una forma excelente y que logra mostrarnos los horrores de la guerra sin posicionarse en un bando, sin darnos lecciones de moral. Quizás algún que otro secundario actúa de una forma en la que, diría mi papá, «se le notan las costuras» en cuanto a herramienta para el funcionamiento de la historia, pero más allá de eso, todo es muy creíble y funciona bien.

Como última observación, volvemos a tener esa narración desde dos perspectivas, en presente. Esta vez, quizás, incluso más necesaria que en el primer libro, dado que los personajes no están juntos todo el tiempo y tenemos la posibilidad de saber qué pasa en distintos lugares y momentos. Como siempre, las voces cambian según el personaje y la construcción es creíble, pero no me resultó tan ágil como en la primera parte. De hecho, casi que la primera mitad de la novela se me hizo un poco más densa —aunque es entendible el porqué y estoy a favor de que se así—, mientras que después como que «explota» y es imposible parar de leer. 

Si bien el final me encantó y me hace feliz el espacio que da para teorizar sobre la siguiente parte, que muero por leer, creo que hay algunos elementos que perdieron la intriga o el shock dado que tenemos el precedente de la primera novela. Me refiero en particular a los spoiler wisps, los susurros del primer libro, o the Fury, que se puede deducir fácilmente de dónde viene apenas notamos que LaRoux Industries está involucrada spoiler. No hace el libro menos interesante ni creo que se hubiera podido evitar, igual. Creo que el enganche igual se consigue por otros lados.

En definitiva, es una secuela que para mí está a la altura de su predecesora, a pesar de ese pequeño detalle del ritmo. Que da pie a que el mundo y sus personajes se abran a un final épico, que estoy esperando con ansias. Qué alegría me da haberme implicado con esta saga. La recomiendo un montón.