El planeta Antirios está habitado por una raza de seres humanoides que se comunican telepáticamente y aborrecen cualquier tipo de ruido. En un mundo donde el silencio es ley, la aparición de un misterioso bebé llorando, surgido de la nada, supone toda una crisis.
El cónsul federativo Kritias Sabas deberá encargarse de recoger al bebé, una niña bautizada como Azul, y trasladarlo a Irinia, corazón de la Federación de Planetas. Pero Azul encierra más misterios que el de su extraño origen...
Será criada en orfanatos de distintos planetas hasta culminar su educación en la férrea escuela de Zahirus. Ya como oficial de la Flota Federativa, descubrirá el amor y la profecía que pesa sobre ella haciéndole imposible disfrutar de una existencia normal y feliz. Se verá forzada a alejarse de los seres que la quieren, perseguida por la sombra de la maldición de su nacimiento, aquella que señala su verdadero destino, destruir al Demiurgo Oscuro, antes de que este poderoso y terrible ser engulla a todos los mundos.
Llegué a este libro por ese instinto que tengo a veces. Me lo crucé en las novedades de un blog que ya no recuerdo y fue instantáneo; tanto la portada como la sinopsis me llamaron poderosamente la atención. Como siempre, me lamenté por no poder leerlo en un futuro cercano. A Uruguay los libros no siempre llegan, y si lo hacen, es con demora. De algún modo, sin embargo, llegué al blog de la autora y al final terminamos charlando por Twitter (para los que se quejan de las redes, ja). No solo nos caímos bien, también comprobé que era una persona amable y generosa, y gracias a ella pude leer este libro.
Tenía miedo de que, al final, terminara por no gustarme. Todo me decía que sí, que me iba a encantar, y sí, tenía razón. Le tengo que hacer caso más seguido a estos instintos. Así he llegado a muchas de mis lecturas más memorables.
No sé bien por dónde empezar. No es una historia común ni sencilla, y mucho menos corta. Son casi novecientas (884) páginas que devoré en algunos días. Sé que yo soy un poquito psicótica e insomne, pero hacía mucho que no estaba hasta tales horas leyendo. Eso dice bastante, ¿no?
Hablar de influencias en alguien es peligroso. Se corre el riesgo de, más que adivinar lo que había en la mente del autor, terminar reflejando el bagaje propio. Y si es así, lo que yo recordé al leer era una historia con tintes de La Fundación de Asimov, el ciclo de Ekumen de Ursula K. Le Guin, alguito del Warcraft y el Spore. Difícil explicar algunas de estas cosas sin que hayan leído el libro.
¿Qué puedo contar sin spoilear? Queda claro que es una historia extensa, pero no solo por la cantidad de páginas, sino porque pasa de todo. La autora nos presenta un mundo enorme, riquísimo en razas y culturas, con descripciones fascinantes y que deja con ganas de saber más y más sobre ese universo spoiler (y habiendo tantos, ¡de muchos otros!) spoiler.
Parecería que leyendo la sinopsis nos cuentan todo, pero no. Ni cerca. La historia se despliega, gira, da vueltas sobre sí misma y, cuando parece que alcanza un descanso, vuelve a tomar carrera para llegar a nuevos momentos llenos de acción, suspenso y muchísima tensión. Hacia el final no se puede soltar el libro. En serio, yo traté, mais não. Não se pode. Tampoco se puede contar de qué se tratan los distintos arcos de la novela, porque cada uno incurriría en un spoiler del anterior. Lo siento mucho, porque me encantaría hacerlo. Todos son fascinantes, en todos aparecen personajes interesantísimos y nuevas geografías para descubrir.
El final es demoledor. Se anuncia, se espera desde las primeras páginas, y aun así pega con fuerza. Me habría gustado un poquito más de desarrollo, pero se entiende la urgencia de la situación. Creo que, de todas formas, esa carga emotiva de las últimas páginas no se traslada al epílogo, que se me hizo un poco frío, en un punto. No fueron palabras de cierre que me dejaran emocionada, sino que introducen algo más, pero ya está.
Voy a hablar de los personajes por orden geográfico.
Mis favoritos en la Federación fueron Lázarus y Kritias Sabas (duh). El primero por la humanidad que demuestra, en muchísimos sentidos. Lo incondicional que es a Azul, a pesar del realmente poco tiempo que comparten, es conmovedora. Toda su historia es conmovedora, en un punto. Kritias me resultó interesantísimo y no hay cómo no tenerle simpatía a lo largo de la historia. Los secundarios están bien definidos, pero son tantos que no podría hablar un poquito de cada uno. Sí quiero resaltar a Dankina, una persona que demuestra otro tipo de humanidad, bastante más escalofriante. A otros les quise pegar en varias ocasiones. Mención especial a Boreal y a Dante Perius, que me sacaron de quicio.
Del Imperio Pélago solo empaticé con Amunet, aunque realmente no hay mucho de dónde elegir, ya que es poca la interacción que tiene Azul con la gente allí. Amunet carga con un peso enorme y parece blindada. Su evolución es muy interesante, pero no se nos muestra demasiado. Me habría gustado ver más de ella (y de Dorian).
De los *copia y pega* cthulkugs me gusta Satinus, pero no así Arkenus. Aunque sé que tiene todo para ser un protagonista entrañable, de alguna forma me costó empatizar con él y quererlo. Quizás porque Lázarus ya me gustaba de antes, yo qué sé. Perdón. Voy a meter aquí a Limidú, a pesar de no ser *copia y pega por incompetente* cthulkug. Qué cosa dulce y tierna. Quiero uno (¿.
El villano villanísimo, el Demiurgo Oscuro, no me terminó de gustar. Esto es personal; por definición y por naturaleza, es malvado. Es energía negativa, oscuridad, destrucción. No soy muy amiga de este tipo de antagonistas porque prefiero otro tipo de desarrollo psicológico para su «villanía». También sé perfectamente que este tipo de malos representan muchos miedos que compartimos como especie, y que alguien pueda ser capaz vencerlos nos llena de felicidad, al escuchar esas historias, desde tiempos muy lejanos. Esta crítica es puramente subjetiva.
Llegamos a la protagonista, Azul. A Azul aprendí a quererla. Al principio me costó aceptarla (como a los de la Federación, qué ironía), toda ella tan hermosa, fría y letal. Tan callada y lejana. Cuando la vida empezó a vapulearla un poco (porque sí, le pasa de todo y sufre y pasa horrible, la pobre), la vi más humana, más cercana, y se me hizo más fácil empatizar. Me gustó que no fuera tan OP (overpowered, demasiado poderosa) como parecía al principio. Si la lastiman, sangra. Incluso llega a estar herida de gravedad en varias ocasiones. Esto hace que no digamos «y bueh, igual seguro sale ganando». No, los combates están llenos de tensión y se sufren como quienes la quieren y la miran pelear. Que es mucho. Azul es responsable y tiene un gran sentido del honor. Es quizás esto lo que la lleva a tener tantos problemas, pero se hace cargo. Una dama.
Lo que no me llegó a convencer fue la forma de relacionarse de los personajes. Es decir, se nota que hay espacios de tiempo que no nos cuentan en los que ellos se conocen más, pero nosotros no los vemos y por tanto no los sentimos de la misma forma. Esto hace que algunas relaciones, en especial las amorosas, se den muy rápido a los ojos del lector. Es importante decirlo, porque el amor es una motivación y un pilar muy fuerte a lo largo de la historia. Tampoco puedo pedirle a una historia de casi novecientas páginas que se amplíe; los acontecimientos están muy bien así y agregarle más páginas es criminal. Siempre se puede aplicar tijeras (entiendo que no todos leen las cosas en una noche y que algunas cosas se olvidan y las ayudas a la memoria sirven, pero en algunos momentos la repetición de conceptos me pareció desacertada), pero creo que todo lo que sucede es parte necesaria del crecimiento (y entrenamiento) de los personajes. La Azul del principio nunca podría haber vivido de la misma forma el final de esta novela. De ninguna manera.
Esta reseña se me está haciendo larguísima y siento que queda mucho para decir, para hablar, pero voy a ir redondeando. Azul, el poder de un nombre. Samidak es un libro que me hizo pasar noches en vela, deseando saber en todo momento qué iba a pasar. Soy muy ansiosa y no tuve más remedio que casi embutírmelo. Se lee así, con un interés constante, a pesar de que los primeros capítulos parezcan lentos. Esto es por la prosa de Begoña, que no es nada densa, sin dejar de perder así belleza en sus palabras. Con un mundo tan rico, los capítulos introductorios son fundamentales para entender las cosas, pero pesan más. Después, es todo más veloz.
No sé si recomendar el libro a todo el mundo. Soy partidaria de que las buenas historias las puede disfrutar cualquiera, pero hay mucha gente que no se acerca ni aunque le pagues a lo que huela a ciencia ficción. Me alegra decir que hay tintecitos fantásticos, pero creo que eso no va a atraer a los que no gustan de estas cosas. Da lástima, pero qué se le va a hacer.
Si tienen ganas de saber más de los mundos que se plantean en la historia, les recomiendo entrar al blog de la autora o a esta reseña completísima, a ver si así se convencen del todo.
Ustedes vean, amiguitos. Yo, por mi parte, espero ansiosa a leer lo próximo que escriba Begoña.
No es un genero que me llame, pero tengo mucha curiosidad porque si te gusta a ti ya sabes que es muy probable que a mi también. Lo pongo a mi lista de pendientes. Gracias Sofi por esta super extensa reseña.
ResponderEliminar¡Hola! No soy de leer este género... y como tengo demasiados pendientes lo dejaré pasar. Pero tampoco lo quiero descartar del todo por lo que nos cuentas en la reseña.
ResponderEliminarBesos.
Tiene buena pinta. Si algún siglo de estos termino con los que tengo pendientes, seguramente caiga. La reseña te ha quedado genial :D bsss
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarEsta semana me prometido no apuntarme ninguno más a mis pendientes jajaja
(No sabes como tengo que morderme las uñas con las novedades de este mes xD)
El libro no me llama igualmente, y nunca he leído nada de esta autora, pero me la voy apuntar para cotillear sobre ella.
Siempre me gusta leer algo sobre autores que no conozco.
Gracias por la info! :)
Un besito.
¡Nos leemos!
¡Hola!
ResponderEliminarEsta semana me prometido no apuntarme ninguno más a mis pendientes jajaja
(No sabes como tengo que morderme las uñas con las novedades de este mes xD)
El libro no me llama igualmente, y nunca he leído nada de esta autora, pero me la voy apuntar para cotillear sobre ella.
Siempre me gusta leer algo sobre autores que no conozco.
Gracias por la info! :)
Un besito.
¡Nos leemos!
¡Hola! No me llama mucho la atención, así que lo dejaré pasar.
ResponderEliminarBesos :)
Pues yo me acabaré leyendo este libro, lo que no sé es cuando.
ResponderEliminarZenkiu por la reseña, clon!
Un beso =)
Hola.
ResponderEliminarHace tiempo que vi la reseña de este libro y me llamó mucho la atención, y si, no me gusta la ciencia ficción, pero si es un libro bueno, por supuesto que le doy una oportunidad, además me gusta ese ritmo casi constante de la lectura.
Muchos besos, nos leemos.
Hola, yo acabo de terminar este libro y estoy fascinada, en sí, no leo mucho de ciencia ficción, pero la verdad es que me ha encantado, no he podido despegarme de él en tres días que fu el tiempo que lo terminé. Una buena cantidad de horas en la noche para leer.
ResponderEliminarLo que sí, yo soy team Arkenus, él me gustó mucho más que Lázaruz, que encontré que muchas veces se comportaba de una forma muy tonta, que no la ayudaba en realidad, él en todo el amor que sentía por Azul, debería haber mirado más allá... no ser tan corto de miras.
En lo del malo, no sé, creo que me gustó todo lo que pasó con el demiurgo oscuro, especialmente su final jaja
Saludos!