En la bio de Las lunas de marzo dice que esta es mi primera
novela. Sin embargo, no es ningún secreto en este blog que no es la primera
cosa larga que escribo. De hecho, es la séptima (qué numerito, ¿eh?). Entonces,
¿por qué decir que es la primera?
No es porque sea la primera publicada. Es porque es la
primera historia larga a la que puedo llamar novela sin sentirme rara o un
fraude. Sin sentir que la estoy convirtiendo en más de lo que es. Las lunas de
marzo es la primera historia que escribo que tiene una cierta unidad y
continuidad que la hacen ser un todo y no algo flojo que se balancea por todos
lados. Es redonda y la siento completa.
La primera de estas historias largas se llama Los cinco
elegidos y la terminé con trece años, en 2006. Obviamente, ya en el título se
nota qué tipo de historia es. Se trata de varios hermanos, varios reinos, mucha
fantasía y muchas pretensiones. No le puedo decir novela.
La segunda se llama La octava profecía (por supuesto que es
de fantasía) y la escribí con catorce años. Aunque la narración y la
construcción mejoran mucho, hay demasiadas inconsistencias, es muy abierta y
demasiado cliché como para reescribirla y darle un lavado de cara. No le puedo
decir novela.
La tercera se llama Las llaves del silencio y es mi historia
preferida (tampoco es ningún secreto que Lunas no lo es). Tenía entre quince y
dieciséis años y mucho tiempo libre. Aunque amo a los personajes y toda la
relación con la astronomía, hay muchas inconsistencias y algunas partes hasta
carecen de sentido. Sin una buena reescritura, no le puedo decir novela.
La cuarta se llama Páginas en blanco, también de esa época.
Es de mis preferidas porque con ella pude demostrarme a mí misma que podía
escribir una historia entera en segunda persona. Es bastante simple, pero peca
de ingenua y la resolución de los acontecimientos no es creíble. No le puedo
decir novela.
La quinta y la sexta son Proyecto Pandora y Proyecto
Epimeteo, las dos primeras partes de una trilogía distópica, que escribí con
entre dieciséis y diecisiete años. Amo mucho esta historia y a sus personajes,
aunque según algunos no se note (la pasan mal), pero tiene los mismos errores
que Las llaves del silencio. Actualmente, mis planes son reescribir ambas
partes y terminar la tercera, pero no es un proyecto prioritario. No les puedo
decir novelas, por ahora.
Por eso, a pesar de todos los altibajos que tuve al escribir
Las lunas de marzo, es la más redonda y completa. Mucho tiene que ver en esto
la ayuda de Scarlett, mi editora, pero incluso antes ya la sentía de esta forma
(aunque, por suerte, luego de la edición mejoró muchísimo). A Lunas sí que le
puedo decir novela y eso me llena de felicidad.
Te aviso de que el ejército de pitufos asesinos, con los parnys de Neus (¿se llamaban así) y Lilith con Zack van de camino para allá a darte una buena paliza ¬¬
ResponderEliminar¡Que sea la última vez que dices que esas no son novelas! No hieras mis sentimientos así =( Ni los de Gareth, Nina, Max, Paz, Antares... (Se me olvidaron los nombres de Páginas en blanco -.-" El resto de novelas creo que no las conozco).
¡Un besito!
Dí que sí mui querida Bittersweet ;) (ya tú sabes) vamos a zurrarla de lo lindo por quitarse mérito, grr...
ResponderEliminarLas lunas es la más madura de tus obras, ya no eres una niña y tus historias crecen contigo y se hacen más redondas, vale, estoy de acuerdo, pero no subestimes esos trabajos que me hicieron escribirte por primera vez, como la urraca que soy que atesora todo lo que brilla, para decirte el GRAN TALENTO QUE TIENES.
Eres joven y eso es bueno, pero no acabas de llegar con tu primera novela, es tu primer trabajo publicado y revisado por editor, pero llevas mucho curro en las espaldas, no le quites a Las Lunas la magia de ser una séptima hija :)
¡¡¡Un abrazo enorme!!!
Tienes un increible talento Sofi . Aun me acuerdo cuando me mandabas las cosas que escribías , dentro de las cuales estaban Las llaves del silencio y Paginas en blanco . Tu progreso es inminente. Te adoro y me siento muy orgullosa de conocerte. Cuidate mucho .
ResponderEliminarQué lindas las tres <3 (Voy a considerar las amenazas como algo lindo, supongo [?]).
ResponderEliminarPor ahora no las puedo sentir novelas, quizás en otro momento diga "opi, sí, eran", pero justo ahora las siento solo historias. Ojo, que ya vieron que Llaves y la distopía tienen esperanzas.
Gracias :)